
Un escenario nada agradable se registró en la ciudad de La
Paz, cuando dos guardias municipales, le gritaron a un niño que vendía tunas en
una carretilla, hasta hacerlo llorar y tratar de defender su fuente de ingreso.
Según los testigos, los guardias de manera prepotente y
altanera, amenazaron al niño con decomisar su mercancía, por lo que
reaccionaron ante tal actuar confrontando su reacción y reprochando su actitud.
El niño que sólo trataba de vender sus tunas, relató que
vivía con su abuela y su hermanito y que “tenía que salir a ganar unos pesos
para poder llevar comida” a su hogar.
El hecho se registró en la calle Almirante Grau, frente a la
Caja Nacional de Salud de la ciudad de La Paz, y a la fecha, ni el Alcalde Luis
Revilla, ni los Jefes superiores de los guardias municipales, han remitido
información alguna sobre el incidente, recordando que muy aparte de su labor,
son innumerables los casos de vulneración y atropello a menores y ancianos
ambulantes. /// ggrd