Los reportes de campo indican que la campaña 2024-2025 alcanzará un rendimiento promedio de 2,27 toneladas por hectárea de soya, superior a las 1,80 t/h del ciclo anterior. Esta mejora permite incrementar en 23,7% el cupo de exportación de este producto en relación a la gestión 2024, informó este viernes, el viceministro a.i. de Comercio y Logística Interna, Luis Miguel Murillo.
“El
Gobierno ha asumido estas medidas con el fin de proteger el consumo interno y
permitiendo la recuperación del sector en condiciones complejas, logrando a la
fecha un 90% de la cosecha de soya según declaraciones del sector”, señaló.
Explicó que
en la composición de las exportaciones (en millones de dólares) en la gestión
2024, el grano de soya representa apenas el 8% del total exportado, mientras
que los subproductos industrializados (aceite crudo y refinado) concentran el
37% y la torta de soya, el 55%. “Estos datos reflejan una política orientada a
sumar valor agregado y diversificar la oferta, más allá de la simple salida de
materia prima”.
Murillo
también destacó que los resultados de esta gestión de gobierno muestran que en
el periodo de 2021-2024 las exportaciones soyeras alcanzaron 1,3 millones de
toneladas y generaron 682,3 millones de dólares, frente a las 123,2 mil
toneladas y 45,5 millones de dólares de periodos anteriores entre 2016 y 2019,
significando un incremento de 12 veces en volumen y de 16 en valor, “lo que
denota el potencial del sector cuando confluyen decisiones oportunas y
acompañamiento del Estado”.
En cuanto a
declaraciones de dirigentes del sector de la soya en sentido de que la
autorización para exportar el grano es tardía porque priva a los productores
bolivianos de mejores precios internacionales, explicó que estos argumentos
pasan por alto el ciclo agrícola y las condiciones reales del mercado.
En este
sentido, explicó que el Gobierno ha priorizado el abastecimiento interno frente
a los eventos climáticos adversos registrados en 2024 y 2025, actuando con
responsabilidad ante la realidad del ciclo agrícola nacional.
“Si bien
algunos sectores sostienen que la autorización para exportar soya fue tardía,
es importante considerar que en enero el país aún se encontraba en plena etapa
de siembra de la campaña de verano y que la cosecha se proyectaba para finales
de marzo a mayo. Por tanto, no existía aún disponibilidad efectiva de grano
para la exportación”, señaló.
El
miércoles 7 de mayo, el Gobierno del presidente Luis Arce Catacora abrió la
exportación del grano soya hasta 250 mil toneladas considerando los resultados
de la campaña de verano 2024-2025 en la que Bolivia tuvo un rendimiento
positivo.
En todo
caso, Murillo sostuvo que el Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía
Plural ratifica su disposición a trabajar de manera coordinada con productores
y agroindustrias para consolidar este crecimiento, fortalecer la competitividad
y garantizar, al mismo tiempo, el abastecimiento interno de alimentos
esenciales. // Fuente: Unicom-MDPyEP