La vacunación contra el sarampión a niñas y niños de 1 a 5 años es una prioridad del Estado boliviano para proteger la salud y el bienestar de la niñez, por lo que el Gobierno nacional hace un llamado a los padres de familia, cuidadores, a revisar el esquema de vacunación de sus hijos y acudir a los centros de salud para aplicar la vacuna SRP (Sarampión, Rubéola y Paperas) que los protege de secuelas graves de la enfermedad.
A la fecha,
se han confirmado 64 casos de sarampión en el país: 60 en el departamento de
Santa Cruz, 3 en La Paz (2 de ellos en la ciudad de El Alto) y 1 en Potosí.
Esta situación representa una seria amenaza para la salud pública, ya que
Bolivia lleva 25 años sin casos de sarampión endémico, un logro sanitario que
hoy se encuentra en riesgo, informó la Ministra de Salud y Deportes, Maria
Renée Castro, en sus cuentas de redes sociales. Por ello, desde el 23 de junio
rige la declaratoria de Emergencia Sanitaria Nacional en el país.
El sarampión no es una enfermedad leve. Se trata de un virus altamente contagioso que puede causar complicaciones severas en niños pequeños, como neumonía, encefalitis, ceguera, e incluso la muerte. Además, debilita el sistema inmunológico de quienes lo padecen, dejándolos vulnerables ante otras infecciones.
“¿Por qué
priorizar a niñas y niños de 1 a 5 años? Este grupo es el más vulnerable a las
complicaciones del sarampión. La vacuna SRP está especialmente diseñada para
proteger en esta etapa crítica de desarrollo. La inmunización temprana salva
vidas y previene brotes en guarderías, preescolares y comunidades”, enfatizó la
Ministra Castro.
La vacuna
SRP es segura, gratuita y altamente efectiva, y protege también contra rubéola
y paperas, disponible en todos los centros de salud y vacunatorios del país.
La
vacunación oportuna es la única forma comprobada de prevenir el sarampión. Se
recomienda que los padres o tutores revisen el carnet de vacunación de sus
hijos y verifiquen que tengan las dos dosis de la vacuna SRP.
En Bolivia,
el esquema regular de vacunación contra el sarampión establece que la primera
dosis se aplica a los 12 meses de edad (1 año) y la segunda dosis a los 18
meses (1 año y medio). Sin embargo, debido a la actual epidemia en curso, de
manera excepcional, la segunda dosis se está aplicando un mes después de la
primera, con el objetivo de brindar una protección más rápida y efectiva a las
niñas y niños.
La Ministra
de Salud y Deportes enfatizó que la respuesta contra el sarampión debe ser
colectiva. Familias, comunidades, autoridad y el Estado en su conjunto deben
actuar coordinadamente para evitar que el sarampión se propague. “Cada dosis de
vacuna aplicada es una barrera contra el virus. No podemos bajar la guardia”,
concluyó la autoridad de salud. // Fuente: UC/MSYD