Se celebra la Semana Santa y una de las tradiciones de esta fecha es el consumo de comida en base a la carne de pescado. Desde el Ministerio de Salud piden a la población tomar en cuenta cinco recomendaciones al momento de comprar este producto.
Primero. Las amas de casa deben fijarse en la
apariencia del producto; es decir, el pescado fresco debe verse brillante y
húmedo, con escamas bien adheridas a la piel.
La segunda recomendación es tomar en cuenta la
textura, que debe ser firme al tacto y no presentar partes blandas.
Respecto de la temperatura durante su almacenamiento,
debe mantenerse entre los 0°C y 4°C.
Como cuarta recomendación es verificar el lugar de
compra y optar por mercados y tiendas con buena reputación y condiciones
higiénicas adecuadas.
Y, el quinto consejo, es verificar el envasado o
congelado, revisar la fecha de vencimiento y procedencia.
Las características alteradas de los pescados son, por
ejemplo, ojos hundidos opacos, agallas branquias pálidas, verdosas o negruzcas,
escamas que se desprenden con facilidad, olor fétido y superficie opaca y
pegajosa.
«Es fundamental asegurarse de que los productos de mar
estén bien cocidos y hayan sido conservados adecuadamente. No deben ser
descongelados y vueltos a congelar, porque este proceso puede favorecer la
contaminación. Además, es importante lavarlos con agua segura antes de su
preparación”, dijo el responsable del Componente de Enfermedades Transmitidas
por Alimentos (ETA’s), Javier Flores.
BENEFICIOS
El funcionario resaltó los beneficios del consumo de la
carne de pescado y señaló que es una fuente excepcional de proteínas y
nutrientes esenciales para la salud del corazón y el cerebro.
Durante la Semana Santa es una de las alternativas
gastronómicas más saludables y tradicionales, junto al queso y la quinua, entre
los alimentos más consumidos en esta época. // Fuente: La Razón