El nuevo edificio del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB) que se erige en la zona de Lajastambo, Sucre, muestra un notable avance. La obra es parte de uno de los proyectos de inversión que impulsa la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (FC-BCB), con el soporte económico del Banco Central de Bolivia (BCB), y se prevé su entrega el próximo año al pueblo boliviano, para celebrar los 200 años de su independencia.
La construcción se erige en una superficie de 14.332,00 m2 y tiene una inversión de más de Bs 89 millones. La infraestructura que se encuentra en el barrio Pata Lajastambo, populoso distrito de la capital del país, será el recinto del archivo histórico que permitirá custodiar, preservar y difundir la memoria documental de la nación.
En la reciente
inspección que se hizo a la obra, se evidenció un notable progreso que se
traduce, en términos técnicos en un 30% de avance físico y 41% de avance
financiero. En la inspección estuvieron presentes el presidente de la FC-BCB,
Luis Oporto Ordóñez; el director general, Pavel Pérez Armata; el consejero de
Administración, Humberto Carlos Mancilla Plaza; el jefe nacional de la Unidad
de Infraestructura, Weimar Rendón; la jefa de la Unidad de Administración y
Finanzas, Yussela Goyzueta; el director del ABNB, Máximo Pacheco. La visita al
edificio estuvo guiada por la fiscal de obra, ingeniera Ivone Sandy, los
arquitectos Pablo Poveda, Marvin Ruiz y la arquitecta Mercedes Peñaranda
(supervisión), a ellos se unieron los ingenieros Jorge García y Mauricio
Miranda (contratista).
Durante el
recorrido se constató que la obra ya tiene una estructura definida y los
pilares se encuentran emplazados de acuerdo al diseño establecido en el
proyecto. La construcción se basa en un paradigma eco tecnológico que incluye
sistemas de cosecha de agua de lluvia para garantizar su consumo en épocas
secas y sistemas fotovoltaicos para transformar la radiación solar en energía
eléctrica.
La empresa
supervisora, representada por el arquitecto Poveda, explicó que la obra
continúa su avance según lo previsto e invitó a los presentes a recorrer el
interior de la edificación. La fiscal resaltó que, para lograr un mayor avance,
la empresa adjudicada contratará a más personal calificado. La arquitecta
Mercedes Peñaranda mostró a los visitantes los lugares donde estarán ubicadas
las diferentes áreas de la futura Biblioteca y Archivo Nacionales de Bolivia,
como la biblioteca pública, biblioteca infantil, el moderno auditorio, el
archivo y la sección de investigadores.
Al finalizar la
inspección, la delegación de la FC-BCB tuvo una reunión junto con el equipo
responsable de la edificación de la obra, en la que se informó sobre el avance
físico y financiero de la obra.
El presidente de
la FC-BCB expresó su satisfacción por el notable avance de la construcción. Al
mismo tiempo, recomendó seguir en ese mismo ritmo y plantear nuevos frentes de
trabajo para que la obra pueda entregarse según el plazo establecido.
El Consejero de
Administración de la FC-BCB, Humberto Mancilla fue designado para inspeccionar
la obra con frecuencia periódica e informar al Consejo de Administración de la
FC-BCB sobre el progreso de la construcción. De igual manera, se recomendó a la
empresa incorporar a más obreros, con el fin de aumentar el porcentaje de
avance físico.
La
infraestructura contará con diversos espacios multifuncionales, como salas de
teatro, un café, restaurante, áreas de lectura, zonas de recreación, sistemas
avanzados de control de humedad, cámaras de estabilidad de temperatura y salas
destinadas cuarentena, aprestamiento, conservación y restauración de
documentos.
La FC-BCB, gracias al soporte económico del BCB, hace posible el importante proyecto que tendrá un impacto económico, educativo y cultural en la ciudad de Sucre. El próximo año, el pueblo boliviano inaugurará la construcción de la megaobra para celebrar el Bicentenario del país.