Una exposición inadecuada de féretros, residuos de restos humanos y funerarios se evidenció en una inspección en el Cementerio General de La Paz. La situación representa un riesgo para la salud pública, señaló el concejal del Movimiento Al Socialismo (MAS) Javier Escalier.
El legislador verificó la sala de reducciones del
camposanto. En el lugar están expuestos los ataúdes aún con restos humanos,
ropa y otros materiales de exhumaciones que se constituyen en un “peligro por
el riesgo biológico”.
“En estos ataúdes pueden contener restos de fluidos y
microorganismos que permanecen activos, generando focos de contaminación.
Estamos hablando de residuos vinculados a restos humanos que no pueden ser
tratados como basura común”, señaló el legislador.
Otro riesgo que advirtió es la proliferación de
vectores, como moscas, roedores e insectos, que están entre los residuos, un
ambiente que consideró propicio para reproducirse y que pueden trasladar
enfermedades a otras áreas del cementerio e incluso fuera de él.
RIESGO
RESPIRATORIO
A esto se suma el riesgo respiratorio, por la
descomposición de materiales orgánicos y textiles, que puede liberar
partículas, malos olores y esporas que afectan a visitantes y sobre todo a los
trabajadores del cementerio.
El concejal también alertó sobre el riesgo de contacto
directo, ya que los residuos se encuentran expuestos, con presencia de maderas
astilladas, clavos y restos metálicos. “Cualquier corte o herida en este
contexto eleva significativamente el riesgo de infecciones”, advirtió.
En medio de estas observaciones, el concejal describió
el lugar afectado: “La sala de reducciones es un ambiente semiabierto, con
portones metálicos y techo parcial. En el lugar se acumulan sin control restos
de ataúdes viejos, maderas rotas, colchones y telas en descomposición, todo
directamente sobre el piso”.
Añadió que este espacio se encuentra en la parte
posterior del cementerio, justo al lado del estacionamiento, por donde circulan
cientos de personas cada día, lo que agrava aún más el riesgo sanitario.
ESPACIO
Escalier recordó que esta sala fue entregada en 2024,
por lo que no se trata de un problema antiguo. “Es un espacio nuevo que ya está
funcionando sin ningún protocolo de bioseguridad ni manejo adecuado de residuos
funerarios. Esto es una clara muestra de negligencia en su administración”,
afirmó.
Señaló que urge una intervención inmediata del
gobierno municipal para retirar y disponer correctamente estos residuos,
aplicar medidas de bioseguridad y evitar que este foco de contaminación
continúe poniendo en riesgo la salud pública de la población que visita
diariamente el Cementerio General. // Fuente: La Razón

