Tras el levantamiento de la subvención a los hidrocarburos, el Gobierno activó el Programa Extraordinario de Protección y Equidad (PEPE), un mecanismo de apoyo económico dirigido a los hogares más vulnerables de Bolivia. La medida está normada en el Decreto Supremo 5503 y tendrá una vigencia de 12 meses.
El PEPE establece dos grupos de beneficiarios. El primero recibirá un pago mensual de Bs 150, con un tope acumulado anual de Bs 450. En este segmento se encuentran personas que ya perciben bonos sociales, así como padres o tutores de estudiantes de unidades educativas, fiscales y de convenio, bajo la modalidad de un bono por grupo familiar.
El segundo grupo está conformado por personas adultas mayores de 60 años que reciben la Renta Dignidad en calidad de no rentistas, es decir, que no perciben jubilación de la Seguridad Social de Largo Plazo.
Para ellos, el beneficio será de Bs 150 mensuales durante 12 meses, hasta alcanzar un máximo de Bs 1.800.
PEPE
Entre los requisitos para acceder al programa figuran ser beneficiario del Bono Juana Azurduy, del Bono de Indigencia por discapacidad visual, estar registrado como persona con discapacidad grave o muy grave, o recibir la Renta Dignidad como no rentista.
La norma aclara que cada persona solo podrá acceder al PEPE por un único criterio, aunque cumpla más de uno.
Quedan excluidos quienes perciban rentas del sistema de reparto, pensiones de jubilación o de riesgos previsionales, así como asegurados dependientes con aportes recientes a la seguridad social, con excepción de los independientes. El decreto advierte que los cobros indebidos darán lugar a procesos de recuperación y acciones legales.
El pago del beneficio se realizará mediante abono en cuenta, cobro en ventanilla de entidades financieras autorizadas o incremento en la planilla correspondiente.
Además, los beneficiarios deberán completar un formulario de registro del hogar durante la vigencia del programa, requisito clave para una eventual continuidad del apoyo estatal. // Fuente: La Razón

