En diferentes puntos de bloqueo “evista” están paradas 133 cisternas con más de 3,5 millones de litros de gasolina y diésel, lo que pone “paraliza la logística nacional” y amenaza el abastecimiento en los nueve departamentos, informó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Alejandro Gallardo.
“Estos bloqueos,
impulsados con fines políticos, dificultan la libre transitabilidad y la distribución
oportuna de combustibles”, denunció y precisó que el departamento de Cochabamba
es uno de los más afectados, “no solo en carburantes, sino también en alimentos
y otros bienes esenciales”.
Al momento más de 60
millones de litros de combustibles ya ingresaron al país y continúa la descarga
en la terminal de Sica Sica, Arica, desde donde se despachan hasta la planta de
Senkata, en El Alto, para su distribución.
En la actualidad, la
capacidad operativa es de 150 cisternas por día desde Arica, Chile, cuyo
objetivo es normalizar gradualmente la oferta, aunque reconoció que “las filas
no desaparecerán de inmediato”.
Gallardo precisó que se
ejecuta puentes aéreos y otras medidas logísticas para mitigar la crisis, al
tiempo que se combate la especulación y el agio vinculados al
desabastecimiento.
“Si la exigencia es
normalizar el abastecimiento, lo mínimo que se debe hacer es permitir que el
combustible llegue a los surtidores”, aseveró y advirtió que los bloqueos
prolongados “ponen en riesgo a todos los bolivianos”.
Gallardo confirmó el
fallecimiento de una persona en el contexto de las protestas y exhortó a los
movilizados a deponer actitudes.
“Si decimos amar a
Bolivia, debemos trabajar por el bienestar del pueblo, no por intereses
particulares (…) pedimos reflexión y conciencia”, expresó. // Fuente: ABI