En su segundo día, la movilización de la COB se tornó violenta y dejó ocho policías heridos por petardos y dinamitas. Los transeúntes criticaron la agresividad. El presidente Rodrigo Paz cuestionó la marcha del ente matriz de los trabajadores contra el DS 5503 y aseguró que no retrocederá en la norma.
Obreros de
la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB) y campesinos
se enfrentaron ayer contra la Policía luego de intentar rebasar el cordón de
seguridad de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP) en los accesos
a la plaza Murillo.
Ocho
efectivos policiales resultaron heridos por los disturbios registrados en la
intersección de las calles Ingavi, Yanacocha, Socabaya y Comercio. Según el
reporte oficial de la institución del orden, las lesiones fueron provocadas por
el impacto de petardos, dinamita y otros artefactos explosivos lanzados durante
el conflicto.
Según
reportes preliminares, un efectivo policial resultó herido en la calle Comercio
por la detonación de un artefacto explosivo (dinamita). La onda expansiva
provocó que el oficial fuera derribado, causándole lesiones de diversa
consideración.
Los
uniformados se encuentran estables en el Hospital Obrero, donde reciben
atención médica.
Un minero
detenido durante los incidentes fue liberado en la tarde luego de comprobarse
que no portaba explosivos, según informó la Red Unitel.
REPROCHES
La
ciudadanía paceña lamentó la protesta “violenta” de los marchistas. En la calle
Comercio, las vendedoras gritaron: “Déjennos vender”. Los mineros comenzaron a
retirarse debido al rechazo de la población paceña.
El
conflicto continuó en la calle Potosí, donde los transeúntes también
protestaron por la violencia de los marchistas en su reclamo.
La Central
Obrera Boliviana (COB) convocó a una marcha nacional acompañada de un paro
indefinido y bloqueo de carreteras. La medida de presión surge en rechazo al
Decreto Supremo 5503, norma que dispone la eliminación de la subvención a los
combustibles y establece nuevos lineamientos económicos y sociales.
DIÁLOGO
El Gobierno
nacional convocó al diálogo al sector, pero no tuvo resultados.
El
presidente Rodrigo Paz criticó la “agresividad” de los sectores en protesta y
fue tajante al declarar que no dará marcha atrás en su decisión.
El
mandatario aseguró que el decreto se mantiene firme y descartó cualquier
posibilidad de retiro pese a la presión social. Al contrario, invitó a
transformar el país y no volver al “pasado”.
Lamentó que
las protestas no se manifestaran contra los proyectos fallidos que impulsó el
anterior gobierno. // Fuente: AEP / DC

