El Gobierno de Bolivia rechazó este viernes el contenido y las conclusiones del denominado "Informe de Derechos Humanos 2024" del Departamento de Estado de los Estados Unidos por unilateral, carente de rigor, objetividad y validez, y por pretender incidir en la política boliviana.
“El
Ministerio de Relaciones Exteriores del Estado Plurinacional de Bolivia rechaza
categóricamente el contenido y las conclusiones del denominado ‘Informe de
Derechos Humanos 2024’ emitido por el Departamento de Estado de los Estados
Unidos”, refiere el comunicado de la Cancillería de Bolivia.
Argumentó
que este documento, elaborado sin consulta ni consentimiento alguno de Bolivia,
“carece de rigor, objetividad y validez, y se enmarca en una visión unilateral
e intervencionista que desconoce la realidad boliviana y nuestras instituciones
democráticas”.
En un
momento en que Bolivia vive en democracia, a pesar de que se la pretendió
destruir desde distintos frentes y a días de celebrarse las elecciones
generales, el Ministerio de Relaciones Exteriores afirmó que “resulta evidente
que este informe pretende incidir en la política boliviana y erosionar la
confianza ciudadana en nuestras instituciones, utilizando afirmaciones
arbitrarias y carentes de fundamento”.
Para esta
nueva elección del presidente y vicepresidente y de los integrantes de la
Asamblea Legislativa, fueron habilitados para sufragar más de 7,9 millones de
electores en Bolivia y en 22 países del mundo.
En
consecuencia, el Gobierno boliviano reafirmó que mantiene “claros sus
principios constitucionales, su compromiso con los derechos humanos y su apego
a los mecanismos internacionales legítimos, construidos sobre la base del
respeto mutuo y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados”.
En esa
línea, destacó el examen periódico universal del Consejo de Derechos Humanos de
Naciones Unidas, donde Bolivia expuso los importantes avances en la materia.
“El Estado
Plurinacional de Bolivia reafirma que seguirá trabajando con la comunidad
internacional sobre la base del diálogo respetuoso, la cooperación genuina y el
estricto apego al derecho internacional, rechazando cualquier intento de
instrumentalizar la agenda de derechos humanos con fines ajenos a su propósito
esencial”, estableció. // Fuente: ABI