Una retreta musical, arcos de aguayo y banderas bolivianas y venezolanas se colocarán en los accesos al escenario deportivo, para dar la bienvenida a los dos seleccionados que este jueves se enfrentarán en ‘El Titán’.

Los dirigentes de fútbol alteño, los vecinos, las autoridades municipales y la Policía Boliviana anuncian una logística de recibimiento y seguridad para los dos equipos.

«Verificamos que todo salga bien. Ya se tiene el plan de seguridad, serán tres cordones que se va a tener, se desplegará más de 1.800 efectivos policiales. También nuestras caseritas (vivanderas) están listas para trabajar al interior y afuera del estadio: de igual manera los vecinos se están preparando. Estamos con buena vibra, esperando buenos resultados», dijo Eva Copa, alcaldesa de la ciudad de El Alto.

Mientras que la Dirección de Culturas de El Alto prepara una retreta musical que se instalará fuera del cordón de seguridad, con arcos de madera y aguayos, además se colocarán banderas bolivianas y venezolanas, para dar la bienvenida a los aficionados que lleguen al escenario

Se supo que se anticipa una fiesta deportiva en las afueras del estadio, con la idea de dar buena vibra al equipo nacional.

«Los alteños siempre hemos sido gente acogedora, nos gusta que vengan a visitarnos, nos gusta que vengan a conocer nuestra identidad y cultura. Los invitamos a todos», sostuvo la burgomaestre.

La autoridad municipal también señaló que se habilitará los Buses Municipales para que los hinchas lleguen con facilidad al partido.

Mientras tanto, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) última detalles de logística para el encuentro entre Bolivia y Venezuela.

“El anillo de seguridad este jueves se instalarán desde las 11.00 alrededor del estadio. Las puertas se abrirán desde las 13.00 para el ingreso ordenado de los aficionados”, sostuvo José Claure, gerente de Marketing de la FBF.

Añadió que están contentos con la respuesta del público, que la venta seguirá este miércoles y se confía en que se venderán todas las entradas para este jueves. // Fuente: La Razón