Las Fuerzas Armadas, la Policía Boliviana y los pueblos indígenas entregaron al presidente Rodrigo Paz, en actos protocolares y de forma separada, bastones de mando que representan el reconocimiento a su alta investidura democrática.

Una vez juró como presidente, Paz salió de la Asamblea Legislativa y lo esperaba en plaza Murillo el comandante de las Fuerzas Armadas, el contralmirante Gustavo Primitivo Aníbarro, para entregarle el Bastón de Mando. Sosteniendo en la mano este símbolo de mando, recorrió los alrededores de plaza Murillo.

A su paso, acompañado de su esposa, María Elena Urquidi, y del vicepresidente Edmand Lara, recibió muestras de apoyo y aprecio de las personas que se apostaron desde muy temprano en los alrededores del centro del poder político.

Cuando llegó al frente de la Catedral Metropolitana de La Paz, junto a su comitiva, recibió los honores del Regimiento Escolta Presidencial “Colorados de Bolivia”. Y luego fue bendecido por Monseñor Jesús Juárez.

A su ingreso al Palacio Quemado lo esperaban dos dirigentes indígenas, quienes le entregaron un bastón de mando.

De esta forma los militares, policías e indígenas reconocen el mando del presidente Paz. // Fuente: ABI