El exministro de Gobierno, Arturo Murillo, quedó libre del proceso judicial conocido como el caso Samantha, luego de que la parte querellante no se presentara a la audiencia virtual de conciliación y desistiera de continuar con la acción legal. La denuncia acusaba a Murillo por los delitos de difamación, calumnia e injuria, y exigía un resarcimiento de un millón de bolivianos por los daños causados.
El abogado de la exautoridad, Jaime Tapia, explicó que
la jueza del Juzgado Décimo Segundo de Sentencia en lo Penal declaró el
abandono de la querella y el archivo de obrados. Tapia relató que, aunque la
audiencia estaba fijada de manera virtual, la querellante, Lourdes Ninoska
Pacheco Alave, no tomó las previsiones para asistir. Posteriormente, el abogado
de Pacheco reapareció en la audiencia para informar que su clienta ya no
deseaba conciliar, ante lo cual la defensa de Murillo solicitó el archivo
definitivo del caso.
La querella fue presentada por Lourdes Ninoska Pacheco
Alave, quien en 2020 fue erróneamente señalada por el entonces ministro Murillo
como la autora del secuestro de la bebé Samantha. Murillo fue expulsado de
Estados Unidos y ahora cumple condena por otro proceso de corrupción abierto en
Bolivia. Con la decisión judicial, el exministro queda eximido de este proceso
por difamación. // Fuente: La Prensa